
"Hay quien dice que las magdalenas tienen la forma de una pequeña concha y que el origen de las mismas proviene del Camino de Santiago"
Dicen que una joven llamada Magdalena servía a los peregrinos unos pequeños pasteles en forma de concha, con tanto éxito que se extendieron por el resto de lugares del Camino y por Europa, cierta o no esta leyenda, lo que sí es seguro es que están buenísimas y haciéndolas en casa nos aseguramos que los niños comen algo sin conservantes ni colorantes y hecho por ellos!
Como ya os hablé en mi receta anterior de Palmeritas de Hojaldre y Chocolate, después de los pasos que ya sabemos como lavarnos las manos y elegir buena música para, a la vez que cocinamos, bailar y cantar, nos ponemos... manos a la obra!
INGREDIENTES: - 3 huevos - 200 gr. de harina floja de repostería - 125 gr. de azúcar blanco - 50 ml de leche entera - 100 ml de aceite de oliva extra virgen - 1/2 sobre de levadura (8 gramos) - Moldes de papel rizado para magdalenas ELABORACIÓN:En un bol grande batimos los 3 huevos con unas varillas hasta que quede bien esponjoso, luego, mientras seguimos batiendo, pueden colaborar con nosotros los niños añadiendo ellos poco a poco el azúcar, el aceite, la leche, la harina y por último la levadura.





Llenamos los moldes como 3/4 partes y echamos por encima un poco de azúcar, dejad que lo hagan los niños, algunas tendrán mucho azúcar por encima y otras menos, pero ellos encantados, que es de lo que se trata.

