Enseña al niño a dar las graciasDar las gracias

La gratitud es uno de los principales valores que deben aprender nuestros hijos. Los niños, por norma general, son egoistas. Por eso les costará entender que cuando reciben algo, deben dar las gracias. Sobre todo si son pequeños. Antes de los dos años, repetirán la palabra pero no entenderán lo que significa. A medida que crezcan, empezarán a valorar a la palabra ‘gracias’.

Explícale que si alguien hace algo por nosotros, debemos recompensarle con un ‘gracias’. Sea un regalo físico o algo inmaterial. Con el tiempo deben darse cuenta de que recibir un beso de la abuela es tan o más gratificante que recibir un regalo.

Dar las gracias por algo es un refuerzo positivo. También una herramienta para aumentar la autoestima de tus hijos. Agradece las pequeñas cosas que hagan: recoger sus juguetes, ayudarte a poner la mesa… De esta forma entenderán el significado de la palabra, al tiempo que se sienten útiles y autónomos.

Enseñemos a nuestros hijos a saludar

Decir ‘hola’ y ‘adiós’ es un gesto de cortesía que los niños deben aprender desde pequeños. Plantéalo como una norma básica de educación. Forma parte de la comunicación más básica entre las personas. Si quieres que tu hijo sea de mayor una persona sociable, debe entender que saludar es un principio básico. Manifiesta respeto y cordialidad. saludar

¿Cómo enseñarle a saludar? Cuando pase alguien junto a vosotros y le saludes, recuérdale a tu hijo que debe hacerlo. Qué él también debe decir ‘hola’ y ‘adiós’ a sus amigos. Pero ojo, hay niños que no quieren saludar por timidez, que se esconden detrás de sus padres porque les da ‘vergüenza’. En esos casos, no le fuerces, ni mucho menos le humilles con frases como ‘es que este niño nos ha salido muy raro’. Explícale después la importancia de saludar a los demás y ser amable. Poco a poco lo irá asimilando. Dale tiempo.

La importancia de enseñar normas de comunicación

Todo lo que nuestros hijos aprendan de pequeños, les servirá para crecer como un adulto sociable y seguro de sí mismo. De mayor sabrá como relacionarse con los demás y no tendrá ningún miedo a mostrarse como es. Si queremos que nuestro hijo sea de mayor un adulto feliz, tendremos que imponer, desde pequeño, algunas normas. Si le dejamos hacer lo que quiere, de mayor no sabrá enfrentarse a la vida real. Saludar y dar las gracias, son normas básicas de comportamiento y relación entre las personas. Y recuerda, que la mejor manera de que tus hijos aprendan es, dando ejemplo.